Una transacción inmobiliaria se da por concluida cuando el notario firma la escritura de compraventa. Esta etapa tiene lugar generalmente entre uno y tres meses después de la firma del contrato previo, ya sea un contrato de arras u otro contrato de compraventa. Pero antes de firmar y convertirte oficialmente en propietario del inmueble, Eleeter te aconseja realizar una última visita a la vivienda: la visita de cortesía. Se trata de un paso esencial para comprobar ciertos puntos esenciales. ¿Cómo y qué comprobar antes de firmar en la Notaria?

La visita de cortesía: ¿para qué sirve?

La visita de cortesía, la última visita antes de firmar la escritura de compraventa, te permite analizar el estado del piso o casa que vas a comprar. Si has hecho tu oferta y firmado el contrato de arras hace varias semanas, ¡en principio no has vuelto a ver el inmueble! Es importante disipar cualquier duda que pueda existir y estar tranquilo sobre el estado del inmueble en vísperas del gran día.

El futuro propietario debe, antes de firmar definitivamente las escrituras y concretar la operación, asegurarse de que todo corresponde a lo notificado en el precontrato. Suele ser aconsejable realizar la visita de cortesía idealmente en las 24 horas previas a la firma definitiva ante Notario. No existe una regla, pero se recomienda realizar la visita lo más tarde posible, o mejor dicho, lo más cerca posible de la fecha prevista a la Notaria.

Los 4 puntos esenciales que debes comprobar

Aunque no es obligatorio, una última visita al inmueble te permitirá comprobar cuatro puntos absolutamente esenciales. Si lo haces a través de una agencia inmobiliaria, por lo general el agente inmobiliario encargado de la venta estará allí para acompañarte en esta visita de cortesía. El objetivo es asesorarte lo mejor posible para que no se te olvide nada. En Eleeter, los agentes se toman como un punto de honor realizar la visita de cortesía y asistir a los compradores.

Sea lo que sea, recuerda que es muy recomendable visitar el inmueble una última vez para comprobar estos 4 puntos absolutamente esenciales:

Si la propiedad está vacía

Como se supone que recogerás las llaves de la vivienda al día siguiente, es importante que te asegures de que el vendedor ya no vive en la vivienda. Ni un inquilino, ni una persona alojada gratuitamente. Esto puede parecer una obviedad, pero todo es posible.

En la misma línea, no dudes en comprobar que se han llevado todos los muebles (aparte de lo que se vende con ellos, claro). Además de los muebles, asegúrate de que se han vaciado todas las dependencias: garaje, sótano, etc.

Si lo mencionado en el contrato sigue presente

Es necesario comprobar que todos los elementos constitutivos mencionados en el contrato preliminar siguen presentes. Tanto la lista de muebles vendidos con el inmueble, como los bienes inmuebles que formaban parte de la propiedad. Por ejemplo, asegúrate de comprobar las lámparas, persianas, radiadores, fregaderos, aparatos de aire acondicionado, etc., si estos elementos han de permanecer en la propiedad.

Si la propiedad no se ha deteriorado

Entre la última visita, la oferta de compra y el tiempo transcurrido entre ambas firmas pueden pasar muchas cosas. Así que es natural querer comprobar que la propiedad no se ha deteriorado y que se ajusta a lo que decidiste comprar. Comprueba que se ha conservado bien o que no ha sufrido desperfectos.

Leer los diferentes contadores de suministros

¿Por qué no? Puede ser el momento ideal para leer los distintos contadores, como los de agua, gas y electricidad. Esto te permitirá poner al día tus respectivos contratos: dar de baja el del vendedor o cambiar solamente de titular (para evitar gastos de alta). Por lo tanto, debes anotar todo y, por supuesto, pedir las últimas facturas a tu vendedor.

¿Qué debo hacer si detecto un problema durante la visita de cortesía?

Si durante la visita se detecta algún problema o desperfecto en la vivienda, como daños por agua o ventanas rotas, por ejemplo, es posible pedir la deducción del coste de las reparaciones del precio de venta de la vivienda. Es posible que algunos compradores se nieguen a firmar la compraventa y esperen a que se repare la propiedad tal como pactado o, mejor,  indicado en el precontrato.

¿Y si el vendedor rechaza esta última visita?

Ten en cuenta que esta visita no es legalmente obligatoria, por lo que el vendedor tiene todo el derecho a rechazarla. Sin embargo, un vendedor que se niega a dejar por última vez visitar el inmueble que vende puede parecer sospechoso. De hecho, no hay ninguna razón válida por la que no quiera que visites la propiedad que estás comprando. Excepto si tiene algo que ocultar.

Puntos a recordar en lo que debes comprobar antes de la firma definitiva:

  • La visita de cortesía, última visita antes de la firma de la escritura de compraventa, permite comprobar el estado del inmueble antes de la compra definitiva.
  • Es importante comprobar que la propiedad está libre de cualquier arrendatario u ocupante y que la vivienda se ha vaciado por completo.
  • Del mismo modo, es importante asegurarse de que todos los elementos o electrodomésticos pactados o mencionados en un anexo al contrato de arras siguen presentes.
  • Esta visita también permite verificar los contadores de suministros y comprobar si el inmueble se encuentra en las mismas condiciones que en la última visita.

¡Comparte tu experiencia o tus ideas! Ahora que sabes qué comprobar antes de firmar en la Notaria, no dudes en compartir con nosotros y con todos nuestros lectores si una vez has sido defraudado por el vendedor de tu vivienda.